lunes, 28 de enero de 2013

A… los contrastes:

¿Cómo y cuándo valoras la salud? ¡Cuando caes en cama!
Mientras nos sentimos bien y sanos damos por hecho que eso es lo normal, dejando de apreciar y agradecer lo importante que es tener salud.
Y… como este ejemplo, muchas de las cosas en nuestra vida.
Nos preocupamos por cosas sin importancia o por cosas que todavía no pasan, y cuando pasan, nos damos cuenta de cómo desperdiciamos aquellos ‘buenos tiempos’. O bien, pasamos la mayor parte del tiempo pensando en lo que nos hace falta, en lugar de disfrutar lo que tenemos. ¿No es esto acaso cosas de locos? Me pregunto: ¿Es sólo mediante los contrastes que uno puede apreciar las cosas ya que sin estos estamos en todo y en nada al mismo tiempo?
De igual manera en el ámbito espiritual, cuando está todo como queremos, damos por hecho que se debe a nuestro esfuerzo ‘físico-material’. Pero cuando las cosas no son iguales a nuestros deseos, entonces suplicamos y apelamos a nuestra parte espiritual, olvidando después que: ese esfuerzo y súplica fue lo que originó aquellos ‘buenos tiempos’.
Son los contrastes los que nos obligan a poner ATENCIÓN a lo que pasamos de largo. Si no existiera esta mecánica ni cuenta nos daríamos de muchas… muchas cosas. Por eso cuando las cosas se ponen mal es cuando más enfocados y atentos permanecemos debido a nuestro gran deseo de querer salir de ese estado que no es nada placentero.
Hemos olvidado a través de generaciones y generaciones lo que es realmente placentero.
La pregunta es: ¿A quién le estamos dando el gusto de sentir placer hoy en día?
Isabel Martínez Loya.

domingo, 6 de enero de 2013

A… Benditos obstáculos:



Les he mencionado en varias ocasiones lo opuesto que resultan las experiencias en nuestro mundo material al significado en el mundo espiritual. Lo que físicamente puede experimentarse como obstáculos o problemas en realidad son Bendiciones. Lo que experimentamos como Bendiciones en realidad son consuelos que nos son enviados para recobrar fuerzas para seguir adelante con nuestra experiencia de vida.

El reto y desafío que implica cada obstáculo en mi vida, me ha dejado un regalo de valor inconmensurable de crecimiento, libertad y expansión de los esquemas que herede, así como también de los instaurados por la sociedad y los que yo misma fabrico día a día  basada en mis propias creencias limitantes. Hoy Bendigo cada uno de ellos y agradezco la fuerza que me obligan a ejercer para romper con todos y cada uno de ellos poco a poco. Su regalo la conquista progresiva de la  libertad.

También es cierto que, sólo agradezco aquellas Bendiciones que alcanzo a percibir, porque sé que hay muchísimas más que paso de largo, sintiendo el consuelo que amorosamente me brindan y el cual necesito después de pasar cualquier crisis existencial. 

Hoy en día claramente puedo percibir desde una perspectiva completamente diferente (OPUESTA) a la que tenía hace muy poco tiempo, que, realmente lo que me ha favorecido como ser humano a lo largo de mi vida y que me ha forjado en la persona que soy actualmente son precisamente esos Benditos Regalos (oportunidades) que humanamente e interpretado como obstáculos. Las Bendiciones son un Grandioso Remanso Amoroso Oportuno y fugaz, una probadita del cielo irrepetible. 

Un obstáculo me deja un Regalo liberador, intangible y permanente, una Bendición me brinda el consuelo necesario para poder seguir adelante. 

Deja de repelar de lo malo que te sucede en la vida, pon atención en los regalos que te dejan y agradécelos amorosamente (sólo puedes verlos después de que ya paso, no antes ni durante). No envidies las vidas que parecen tranquilas… 

¡Las vidas complicadas son las que empiezan Su Regreso a Casa!