sábado, 23 de marzo de 2013

A lo que comemos:


El desarrollo tecnológico cubriendo nuestra necesidad humana de confort, ocupa en producir energéticos una buena parte del territorio disponible para la producción del alimento que requerimos, ocasionando con esto la implementación de artificios químicos en la tierra que ayudan escasamente a resolverla, ya que el 50% de la población mundial pasa hambre.

El uso irresponsable de la tierra en cuanto a lo que sembramos, a los tiempos que le damos, a utilizar fertilizantes y plaguicidas han deteriorado las cualidades naturales que dicha tierra requiere para la obtención del sustento adecuado, dejándola muerta (sin vida mineral y orgánica).

Hoy en día ingerimos un porcentaje bajo de los nutrientes que requiere nuestro organismo para su buen funcionamiento… y muchos de ellos son substitutos químicos.

Cómo dice una la página de ‘Las cañadas Bosque de Niebla’ http://www.bosquedeniebla.com.mx/sitint.htm :
Atrévete a calcular tu huella ecológica y aprende a vivir más sencillamente (no te pintes solo de verde, ve a la raíz de las cosas).
Isabel Martínez Loya

domingo, 3 de marzo de 2013

A… La diferencia entre la envoltura y El Regalo:



El sufrimiento es sólo la envoltura de – ‘El Regalo’.

Quizás has oído esta frase con anterioridad… pero… ¿realmente la comprendes?

El ser humano siempre busca su confort y mantenerse en estados placenteros hasta donde su entendimiento le alcanza.

Vivimos de una forma muy limitada en cuanto a nuestra propia apreciación de nosotros mismos y de Nuestro Poder… ¡Qué nos conformamos con bien poco!

Tan limitada y efímera es la capacidad que utilizamos para interpretar la realidad, que ocasiona nuestro sufrimiento. El sufrimiento nos obliga a buscar otras formas de comprender lo mismo, ya que nos exige hacer un alto y cuestionar nuestra actitud hacia ciertas cosas y al observar que algunas de nuestras creencias llegaron a un camino cerrado.

El sufrimiento obliga a la persona a abrirse a nuevas interpretaciones de si mismo, de los otros  y de la vida misma.

El Regalo es acercarnos cada vez más a nuestra Naturaleza y Poder. Dejar de sentirnos limitados por nuestro ‘yo’ egoísta, frágil y mentalmente separado… para tratar de sintonizar-nos con la Sinfonía Perfecta de la Creación.

Separar la envoltura del Regalo es indispensable para  lograrlo. 

Isabel Martínez Loya