jueves, 12 de enero de 2012

Capítulo IX Las adicciones emocionales

Hoy en día la identificación clara y consciente de  los sentimientos recurrentes  no deseadas conocidas como - adicciones emocionales - abre un nuevo horizonte para un tratamiento de liberación adecuado.  Como en cualquier otra adicción, el primer paso es reconocer que se tiene un problema con ese sentimiento repetitivo e involuntario que altera el estado de ánimo de las personas.

Este lenguaje no es tan conocido por nosotros como lo puede ser el de: sentir hambre y comer, sentir sed y tomar agua, sentir comezón y rascarse la nariz. Este es un lenguaje ignorado por nosotros, porque al no saber que existe, no le hemos puesto nuestra atención. Sin embargo ahí está manifestándose una y otra vez, sin que nos demos cuenta de que algo diferente está sucediendo dentro de nosotros.

¿Qué es una adicción emocional?

La adicción emocional es un sentimiento recurrente no deseado.

Cada sentimiento genera una substancia química específica en el cuerpo.  El constante suministro de un químico específico en el cuerpo ocasiona que éste se acostumbre a él.  Cuando no lo recibe, el cuerpo busca la forma de adquirir dicha substancia enviándole señales eléctricas a nuestro cerebro para que la produzca. La forma que el cerebro encuentra para darle al cuerpo lo que le pide, es a través de los pensamientos.

Las adicciones emocionales deben ser tratadas de la misma manera que las adicciones físicas. Es decir, tomar la contundente decisión de  - no proporcionarle  más de ‘ese químico’  al cuerpo a través del sentimiento involucrado. 

¿Cuál es la diferencia entre emoción y sentimiento?

El sentimiento y la emoción son dos estados emocionales diferentes. La emoción suscita el sentimiento. Es decir, el tipo de sentimiento que generaré depende de la explicación que yo le dé a mi emoción.

La emoción: Es un desorden interior momentáneo debido a un pensamiento no analizado. Es la zona de lo desconocido, es a lo que todavía no le he puesto un nombre o una explicación; es lo que me aleja de mi centro porque no sé qué es lo que está pasando conmigo, ¡estoy fuera de mi!, ¡lejos de mi centro! Ejemplo: No sé que tengo, ...pero me siento mal.

El sentimiento: Es el resultado de una emoción analizada. El sentimiento me lleva a mi centro cuando me hago consciente de lo que me está pasando. Ejemplo: Estoy triste, porque mi hermana no me comprende.

Lo que genera la adicción emocional son los sentimientos. La emoción es el vehículo para generar el sentimiento. No todas las emociones llevan al sentimiento adictivo, por eso es necesario analizar la emoción cuando sucede y no permitir que se transforme en el  -sentimiento-  motivo de la adicción.

Pasos para la recuperar la salud emocional:

1. Aceptar que todos tenemos adicciones emocionales.

2. Identificar cuál o cuáles son las adicciones emocionales que se tienen. Es decir, hacer un análisis de cuáles son los sentimientos nocivos recurrentes en ti.

3. Detener el sentimiento no deseado con el razonamiento. Es decir, cuando te des cuenta de que te encuentras -otra vez- con el sentimiento adictivo, recuerda que es el simple producto de una señal eléctrica de tu cuerpo al cerebro el que lo genera y… ¡detenerlo en ese momento!  

Ejemplo: ¡no voy a darle más de ese químico a mi cuerpo al sentir… miedo, frustración,  impotencia, ira, deseos desmedidos, etc.!

Ejemplos de adicciones emocionales:

Explosividad (ira), necesidad de proteger –celar-cuidar en exceso a los demás, sentimiento de culpa y/o necesidad de perfeccionar las cosas, resentimiento, angustia, ansiedad, generación de deseos y/o envidiar lo que poseen los otros (ya sean cualidades o bienes materiales), codependencia,  estrés, depresión, tristeza, sensación de vacío, pereza, soberbia, gula de todo tipo, frustración, preocupación,  miedo, impotencia, etc.


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Por ejemplo: si tú eres adicto(a) al miedo, al tomar - Flor-i-Valor -  te vas a sentir valiente,  -el miedo y el valor no pueden coexistir. Al no sentir miedo tu cuerpo poco a poco… se desacostumbra al sentimiento adictivo y lo deja de solicitar.

Isabel Martínez Loya


www.florisana.com.mx


isabel@florisana.com.mx




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